Miranda de Ebro, Burgos, 18 de mayo de 1921 – Miranda de Ebro, Burgos, 26 de junio de 2005
Inicia su vida profesional como maestra, tras licenciarse en 1944, en Filosofía y Letras y en Magisterio por la Universidad de Madrid y presentarse a las oposiciones de dicho cuerpo, llegando a ostentar la dirección de un centro escolar. A mediados de los años sesenta del pasado siglo, enfoca su carrera hacia la Arqueología, integrándose en los grupos de investigación que el profesor Alberto del Castillo encabezaba en las provincias de Burgos, Soria y La Rioja. Especializada en Historia Medieval, sus actividades se centraron en la excavación y estudio de necrópolis altomedievales de las mencionadas provincias, ligando así su carrera a la de la también pionera de la arqueología Esther Loyola Perea.
Destacan sus trabajos en las necrópolis de San Juan de la Hoz, Cabriana, Quintana María o Revenga, en Burgos, dirigiendo algunas de las intervenciones. Se interesó también por los materiales cerámicos y epigráficos, así como por la historia de su localidad natal, a la que siempre estuvo vinculada, como demuestran sus múltiples publicaciones.